El Presidente de ANADPE y CEO de JPM Detectives ha publicado el articulo «Participación del detective privado en las investigaciones internas y delitos corporativos»:
Su independencia, control legal y colaboración con los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado consolidan su papel en la prevención del fraude, la protección del patrimonio y la transparencia empresarial.
En un contexto donde las empresas se enfrentan cada vez más a casos de fraude interno, espionaje industrial o conductas delictivas dentro de sus propias estructuras, el papel de los detectives privados se ha convertido en un elemento esencial para garantizar la eficacia, la legalidad y la discreción de las investigaciones.
Estos profesionales proporcionan información veraz y obtenida de manera legal, actuando dentro de un marco jurídico que protege los derechos fundamentales y garantiza la validez de las pruebas.
Su independencia profesional les otorga un papel preferente en la detección de conductas fraudulentas tanto en los centros de producción como en los ámbitos organizativos de las empresas.
Además, su actividad se encuentra sometida a un estricto régimen de control e inspección por parte de las unidades de seguridad privada de la Policía Nacional, que supervisan el cumplimiento de la normativa, las licencias profesionales, los protocolos de actuación y las buenas prácticas.
De igual modo, el artículo 14.3 de la Ley 5/2014 de Seguridad Privada establece la obligación y posibilidad de intercambio de información y colaboración recíproca entre los servicios de seguridad privada y los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, reforzando la transparencia y la cooperación institucional.
Las investigaciones internas no son un fenómeno nuevo. Los detectives privados llevan más de 50 años desempeñando con eficacia, diligencia y profesionalidad labores de investigación en el ámbito empresarial, adaptándose a las nuevas realidades económicas, tecnológicas y jurídicas.
Su participación resulta esencial en la detección de fraudes, robos de información, acoso laboral o manipulación contable, colaborando con departamentos de compliance, auditoría y recursos humanos.
Su intervención contribuye directamente a la protección del patrimonio empresarial y a la prevención de responsabilidades penales de las personas jurídicas.
Aunque los detectives no pueden investigar delitos de oficio competencia exclusiva de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, sí pueden actuar a instancia de parte cuando exista un interés legítimo, aportando pruebas y documentación que pueden ser utilizadas ante las autoridades judiciales.
Sus informes, debidamente ratificados, son admitidos como prueba en los tribunales, respaldando acusaciones o defensas con rigor técnico y legal.
Asimismo, los detectives privados desempeñan un papel relevante en los procesos concursales y preconcursales, donde su labor es decisiva para detectar desaparición de activos, ventas o transmisiones simuladas, operaciones irregulares entre filiales o competencia desleal entre directivos y grupos empresariales.
Su trabajo permite a los administradores concursales y a los acreedores disponer de información fiable que favorece la transparencia y el correcto desarrollo de los procedimientos.
El incremento de los delitos informáticos y económicos, las filtraciones de información y las prácticas de corrupción empresarial han aumentado la demanda de investigación privada.
La independencia funcional de los detectives garantiza la objetividad de las investigaciones y su adecuación a la legalidad, protegiendo tanto el patrimonio como la reputación de las organizaciones.
En consecuencia y para concluir indicamos:
- La colaboración entre el sector privado de la investigación y las instituciones policiales/judiciales y empresariales es, hoy más que nunca, una necesidad.
- Los detectives privados, actuando con rigor, ética e independencia, se consolidan como un eslabón esencial en la cadena de la verdad y un pilar clave en la lucha contra el fraude y la corrupción.
- Su intervención, avalada por los controles, la supervisión policial y el marco de colaboración legal, garantiza la profesionalidad, transparencia y eficacia del sector.
Asimismo, desde la Asociación Nacional de Agencias de Detectives Privados de España (ANADPE) se considera de gran utilidad que los detectives privados puedan asumir en el futuro, dentro de un marco regulado, competencias específicas en la investigación de delitos económicos y cibernéticos, siempre respetando los derechos fundamentales y las competencias reservadas a los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad.
La creciente incidencia de estos delitos, reflejada en los medios de comunicación, demuestra la necesidad de reforzar los mecanismos de detección y prevención mediante profesionales cualificados, controlados y plenamente legitimados como son los detectives privados.
Madrid, Octubre de 2025