Los riesgos de blanqueo de capitales y de financiación del terrorismo son una importante prioridad para el sistema financiero de la UE y la seguridad de sus ciudadanos.
Desde 2018, la UE cuenta con normas más sólidas de lucha contra el blanqueo de capitales. Estas normas dificultan la ocultación de fondos ilegales en tramas de empresas ficticias y refuerzan los controles a terceros países de riesgo. También refuerzan la función de las autoridades de supervisión financiera y mejoran el acceso a la información y su intercambio.
No obstante, las normas deben adaptarse continuamente para hacer frente a los riesgos derivados de:
- la innovación tecnológica, como las monedas virtuales;
- la integración creciente de los flujos financieros en el mercado interior;
- la globalización de las organizaciones terroristas;
- el ingenio de los delincuentes para aprovechar las lagunas o deficiencias del sistema.
Cronología
En diciembre de 2019, el Consejo adoptó prioridades estratégicas para seguir reforzando el marco de la UE en materia de lucha contra el blanqueo de capitales y la financiación del terrorismo.
En mayo de 2020, la Comisión Europea presentó como seguimiento un Plan de Acción que establece medidas para el año siguiente con el fin de mejorar el cumplimiento, la supervisión y la coordinación de las normas de la UE en este ámbito.
El 5 de noviembre de 2020, el Consejo adoptó unas Conclusiones sobre la lucha contra el blanqueo de capitales y la financiación del terrorismo. Las Conclusiones sirven de orientación, en particular para crear:
- un único código normativo que armonice las normas de la UE;
- un supervisor de la UE con competencias para ejercer la supervisión directa;
- un mecanismo de coordinación y apoyo para las unidades nacionales de información financiera.
En julio de 2021, la Comisión Europea propuso nuevas normas para reforzar las medidas de la UE en este ámbito.