La Guardia Civil ha detenido a un hombre, de 48 años, con antecedentes policiales, como presunto autor de un delito de estafa y blanqueo de capitales.
El detenido es lo que se conoce como una «mula» en delitos de «phishing», es decir, la persona que hace de intermediario entre el estafador y el estafado, ha informado hoy el instituto armado.
El detenido abrió una cuenta corriente a su nombre donde se derivaron los 19.500 euros estafados a un empresario de Atarfe mediante el timo del «phishing», dinero que extrajo inmediatamente para evitar que fuese bloqueado, y se lo entregó a un colaborador, momento a partir del cual se pierde la pista del dinero.
La persona estafada denunció que alguien se había colado en la cuenta de correo electrónico de su empresa y había interceptado una transferencia bancaria, había modificado el importe hasta 19.500 euros y había desviado el dinero a otra cuenta bancaria distinta.
La Guardia Civil comprobó que el dinero estafado había acabado en una cuenta bancaria de Roquetas de Mar (Almería), de donde es el detenido.
Los agentes también averiguaron que el detenido había recorrido en una misma mañana cinco oficinas acompañado por otra persona, que había solicitado otros tantos reintegros y que el dinero se lo había entregado a su acompañante.
El «phishing» es una de las modalidades delictivas más utilizadas por los ‘ciberdelincuentes’, que obtienen de forma fraudulenta las claves de acceso de las víctimas a sus perfiles en redes sociales, a sus correos electrónicos y, sobre todo, a la banca online.
El objetivo final del estafador es suplantar la identidad de la víctimas y desviar dinero de las cuentas bancarias a la cuentas de las «mulas», y de estas últimas a manos de los estafadores.
Fuente: La Vanguardia